
Algún día…
Algún día tendremos una buena carretera, todas las calles arregladas, cobertura en cada rincón de nuestro pueblo.
Algún día todas las promesas que nuestros queridos, añorados, ausentes y despistados políticos han hecho se llevarán a cabo. Este año unos, otros años otros, los próximos años aquellos.
Algún día tendremos todos esos servicios que ahora anhelamos y deseamos. Cosas de pueblos pequeños.
Algún día tendremos de todo y más.
Este es un gran lugar hecho con pequeñas cosas. Un lugar donde la naturaleza es considerada la reina de la fiesta. Donde sin querer, sin buscar. Te encuentras con un zorro despistado, unos ciervos cruzando el lago.
Camino por los senderos de la Reserva, cada día menos desconocida. Un tesoro que hasta hace poco solo teníamos el privilegio de disfrutar los de aquí. ¿O allí?.
Algún día no tendremos que explicar a nadie donde estamos, no tendremos que señalar en el mapa donde esta Cijara. Ese pueblecito en una esquinita del Geoparque Villuercas Ibores Jara. Un lugar tan pequeño que las instituciones no saben que hacer con nosotros.
El médico una vez a la semana de la Nava de Ricomalillo (Toledo)
El cartero de Helechosa de los Montes (Badajoz)
El señor cura de Castilblanco (Badajoz)
El ayuntamiento en Alía solo a 44 Km de distancia (Cáceres)
Esto demuestra mi teoría. Somos de Cáceres por un destino de lindes. Medio kilómetro a la derecha, pues de Badajoz. Que si la linde la tuviéramos más a la izquierda pues de Toledo y si estuviese un poquillo más allá, pues de Ciudad Real.
Pero aquí estamos. En un rinconcito del Geoparque Villuercas Ibores Jara. Rozando con los dedos Badajoz y con dos pasos metidos en la Reserva de Cijara.
Algún día estos señores se darán cuenta que escondemos a vista de todos un entorno privilegiado.
Tal vez, cuando la reserva sea de Biosfera, se giraran hacia nosotros y se rifen unas papeletas de inversión.
Y cuando eso pase y la vida de los Pantaneros, gentilicio de los oriundos de este lugar, cambie.
Algún día iras, veras sus paisajes. Verás como corren los niños en la plaza, sin necesidad de Nintendos ni wiffis. Verás a la gente sentada en las puertas al fresco. Te sorprenderá como saluda todo el mundo aunque lleves 5 minutos en Cijara y no te conozcan de nada.
Escribe un comentario
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.